Wali, apodo de guerra que se ganó en Afganistán, se enlistó en la defensa de Ucrania con el propósito de tener ventaja sobre los rusos.

En entrevista con medios, Wali, un reconocido francotirador de origen canadiense con experiencia en Afganistán e Irak, aseguró que no le teme a los riesgos por participar en la guerra de Rusia y Ucrania. Wali prefiere no revelar su verdadero nombre por temor a represalias contra su familia, pues dejó a su esposa e hijo en casa para aliarse a Ucrania, comentó: “Quiero ayudarles. Es tan simple como eso”.

El francotirador de 40 años llegó a Ucrania desde hace una semana, tras cruzar la frontera desde Polonia a inicios del mes de marzo. Según explicó a medios locales, él y otros tres francotiradores más fueron muy bien recibidos por los militares ucranianos. Wali, “uno de los mejores francotiradores del mundo”, expresó: “Estaban muy contentos de tenernos (…) es como si fuéramos amigos desde el primer momento.”

Wally tomó la decisión de unirse a las filas de Ucrania, luego de que Volodímir Zelenski invitara a los extranjeros a aliarse. Por su carácter idealista, tal como se describe, el francotirador no dudó en viajar hasta Ucrania para ayudar frente a los ataques de Rusia. Agregó: “Tengo que ayudar porque aquí hay gente que está siendo bombardeada solo porque quiere ser europea y no rusa.”

Wally declaró que no viajó con armas en esta ocasión, solamente cargó su mochila con máscara antigás, un traje de camuflaje y el chaleco de combate. Toda vez que sabía que el ejército de Ucrania tendría armas, placas de blindaje y drones a libre elección. Pese a los riesgos que enfrenta al enfilarse en Ucrania, el francotirador está decidido a defender el país hasta el final.

“Es terrible (…) voy por razones humanitarias, aunque sé que puedo convertirme en moneda de cambio.” Wally tiene una reputación de darle a “40 blancos” por día; por ello, le conocen como “uno de los mejores francotiradores del mundo”.